Para la base:

1. Mezcla la harina con la sal, déjala 15 minutos en la nevera, después añade la mantequilla cortada en dados y tritura hasta que quede como arena de playa. Puedes hacerlo con una picadora o vaso americano. También puedes hacerlo a mano, pero trabajando la masa muy rápidamente.
2. Una vez mezclada la mantequilla con la harina añade el huevo y amasa hasta que quede ligado. Deja reposar la masa 20 minutos envuelta en film.
3. Estírala y ponla en el molde y deja reposar en la nevera 1 hora.
4. Pincha la superficie de la masa y cúbrela con papel de horno poniendo encima las perlas de metal para evitar que suba. Déjala en el horno 15 minutos a 180º.
5. Una vez cocida, destapa, saca las bolas y cuece unos 5 minutos más.
6. Mientras la masa cuece, prepara el relleno.

También puedes usar hojaldre o una masa brisa preparada.

Para el relleno de la base de queso:

1. Mezcla el queso con la sal, la pimienta y el huevo. Puedes añadir cebollino cortado pequeño.

Para ligar el relleno de verduras:

1. Salpimenta la leche y añade los huevos. Bate con barillas.

Relleno de verduras:

1. Limpia y pela las zanahorias, los nabos y la chirivía
2. Limpia los calabacines, los pimientos y la berenjena.
3. Corta todas las verduras en láminas finas usando un espiralizador o con una mandolina.                        
4. Reserva las verduras

Montaje:

1. Una vez cocida la base, reparte la mezcla de queso y ve colocando tiras de verduras desde el exterior hasta el interior, combinando diferentes colores. Deben quedar apretadas.
2. Una vez completada toda la superficie vierte la mezcla de leche y huevos y cuaja en el horno a 180º.
3. Termina con un poco de tomillo o albahaca por encima.